- Amas de casa y trabajadores denuncian día a día la política de represión de la alcaldesa, Angelina Carreño.
Nicolás Romero, México.- A 50 días de iniciado el plantón para exigir mejores condiciones de vida, solución ante los 72 despidos injustificados y un alto al bloqueo para obras y servicios, trabajadores, amas de casa y la población afectada por las políticas autoritarias de la presidenta municipal priista, Angelina Carreño Mijares, siguen en pie de lucha exhortando a la ciudadanía para que se una a su lucha pacífica.
A través de carteles, voceos, mantas, conferencias y espectáculos culturales, la resistencia pacífica establecida en la explanada municipal de Nicolás Romero sigue creciendo gracias a la solidaridad de la ciudadanía, situación que se refleja en los nicolasromerenses al tener muy en claro que la responsable directa de las afectaciones no solo a ellos sino a todo los habitantes del municipio es Carreño Mijares, aseguró la dirigente social antorchista, Senorina Hernández Ramírez.
Mientras tanto, luego de servir el desayuno para quienes se encuentran en el plantón, María Gómez Cuellar, habitante de la colonia Granjas Guadalupe, asegura que la lucha sólo cederá hasta que el gobierno tenga la disponibilidad de escuchar y reinstalar a los trabajadores afectados. “El problema es que no nos quieren escuchar y por eso nada se soluciona. Se supone que el gobierno debe escuchar a los ciudadanos y Angelina hace todo lo contrario”.
Lucía Trejo del Carmen, habitante de la colonia La Libertad, reconoce que aunque a veces es difícil mantenerse en pie de lucha; el descontento, la inconformidad, así como la consciencia social, son el motor que los impulsa día a día para que la alcaldesa realice obras y servicios en todas las comunidades, “desde que asumió la presidencia municipal, Angelina no quiere instaurar una política social que beneficie a todas las comunidades”.
Héctor Javier Álvarez Ortiz, diputado federal y dirigente del antorchismo en el noroeste mexiquense, ha referido en diversas ocasiones que, como organización social, no bajarán los brazos en la búsqueda de una solución y acudirán a las instancias legales necesarias para que se resuelva lo que, a todas luces, se trata de una campaña para detener el progreso del antorchismo.
