Por: J. Prisco Árciga
Ciudad de México, D.F.- Cumplir 50 años de vida matrimonial es, hoy en día, un evento poco común. En muchos matrimonios alguno hace mutis antes que el otro y la familia sigue sin uno de los pilares; por ello fue emotivo el participar como invitado, acompañado de mi esposa Alma Rosa, a la conmemoración de las Bodas de Oro de nuestros amigos Silvia Villa y Teodoro Rentería Arróyave.
Gracias a Gustavo y a Tedy por la invitación y la oportunidad de compartir con ellos y sus respectivas familias esta celebración íntima; fue muy agradable, además, saludar y conversar con otros amigos y compañeros, que igualmente fueron y son parte del grupo de amistades de los cumpleañeros: Eliseo Lugo Plata, Ricardo Herrera Solís, Gerardo Viloria, Mario Días, Hilda Luisa Valdemar y Lima, Javier González, Elvia Andrade Barajas, María Elena Gómez Lastiri, y Don Roberto Calleja Ortega, Coordinador Operativo de Comunicación Social de la Presidencia de la República.
Me gustó la crónica que publicó Elvia Andrade en su portal de internet, porque resume lo mucho que ahí se vivió, por ellos y con el riesgo de que me demande por replicarla, se las comparto:
Todo empezó con una llamada equivocada
- Teodoro y Silvia celebraron sus Bodas de Oro
- “Si te casas conmigo te haré la mujer más feliz del mundo”
- Tuvieron tres hijos. Les sobreviven Teodoro Raúl y Gustavo
Por Elvia Andrade Barajas
Ciudad de Mexico, Distrito Federal.- Todo empezó con una llamada telefónica equivocada hace 51 años y cuatro meses, el día en que ella corrió un gran tramo para levantar el aparato, que en aquellos tiempos era grande, muy pesado, fijo y de cordón, y cuando él le dijo que no era la persona con la que quería hablar, Silvia, imperativa como siempre, le dijo: “¡he corrido tanto para que me diga eso!…
A Teodoro le gustó su reclamo.
Amigable y caballeroso, como siempre, le propuso que platicaran. Ella volvió a espetar: ¡nunca he platicado con un extraño!, pero él, como buen reportero de Policía, que era en ese entonces, la convenció de charlar.
“Y, bastaron 55 minutos para que tomara la decisión de que quería conocerla. Le pedí que nos viéramos, me costó trabajo convencerla, pero después de un tiempo acepto ser mi novia.
“Al año cuatro meses le propuse matrimonio, y el 2 de mayo pasado cumplimos 50 años de casados, en los que hemos vivido de todo:
“Alegrías, tristezas, crisis matrimoniales, pero todos los días me he esforzado por cumplirle lo que le ofrecí al pedirle que fuera mi esposa.
“Le prometí:
“Si te casas conmigo te haré la mujer más feliz del mundo. Esto a ella le hizo mucha gracia e inmediatamente me acepto”, relató Teodoro Rentería Arroyave, en su discurso a amigos, colegas y familiares, que lo agasajaron en su fiesta de Bodas de Oro con Silvia Villa, con quien procreó a tres hombres, de los cuales les sobrevive Teodoro Raúl y Gustavo, ambos periodistas exitosos, igual que su padre.
El evento fue el sábado pasado en The University Club of México, sobre el bello y sufrido Paseo de la Reforma, hasta donde llegó su entrañable amigo de hace 42 años, quien destacó “la imagen siempre discreta de Silvia”.
Roberto Calleja Ortega, coordinador Operativo de la Coordinación de Comunicación Social de la Presidencia de la República, recordó muchos episodios vividos con el exitoso y comprometido empresario radiofónico Teodoro Rentería, quien a lo largo de su vida ha ocupado importantes cargos periodísticos.
“Ser periodista es muy difícil, pero ser la esposa de un periodista, lo es más; y ser la esposa de un periodista y la madre de otros dos, habla mucho del aplomo, sabiduría y entereza de Silvia”, afirmó Calleja al felicitarlos por sus 50 años de matrimonio.
Teodoro Rentería Arroyave actualmente es Secretario de Desarrollo Social de la FELAP, Presidente fundador y vitalicio honorario de la FAPERMEX, ex presidente del Club Primera Plana, y columnista político en varios medios periodísticos, entre ellos Reportajes Metropolitanos, cuyo equipo le desea larga y feliz vida y muchos años más de ejemplar matrimonio.
Felicidades.
