- Esta sustancia contiene metabolitos altamente nocivos, cuyos efectos, de no ser atendidos de manera temprana, rompen la membrana celular del órgano.
Toluca, México.-El consumo excesivo de alcohol es uno de los principales factores que provocan daños irreparables al hígado, ya que esta sustancia contiene metabolitos altamente nocivos, cuyos efectos, de no ser atendidos de manera temprana, rompen la membrana celular del órgano, destacó el profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma del Estado de México, Marco Antonio Mondragón Chimal.
Durante el 9º Curso Taller de Inmunología “De lo molecular a la medicina clínica”, organizado por este espacio académico, el también especialista en cirugía general detalló que desde su ingesta hasta su absorción, el alcohol produce lo que se llama “efecto tóxico directo”, ya que los mecanismos reguladores de las proteínas del hígado dejan de tener su función de protección.
El especialista de la Autónoma mexiquense puntualizó que cuando el alcohol rebasa la capacidad inmunológica del hígado se desarrolla fibrosis, es decir, la formación de una cantidad excesiva de tejido cicatricial, causa de cirrosis hepática, un padecimiento que no cuenta con tratamiento para su cura.
Indicó que esta deficiencia también ocurre, por ejemplo, con el consumo de medicamentos no controlados, por ejemplo, el paracetamol, que empleado de forma inadecuada contra el dolor de cabeza o resfriados produce daño hepático, pues no debe suministrarse en altas dosis.
Marco Antonio Mondragón Chimal afirmó que todos los productos que consumimos pasan a través del hígado y son transformados en sustancia útiles que serán empleadas por los órganos o sustancias no útiles que serán desechados por medio de la bilis, el intestino o bien, enviadas hacia la sangre.