Texcoco, México. Donald Trump se estrelló con el muro de la realidad, así lo refiere el economista texcocano, Brasil Acosta, en su más reciente análisis acerca de las políticas instrumentadas por el presidente de Estados Unidos. El economista abordó los temas migratorios y económicos, donde el magnate no ha podido consolidar sus mandatos presidenciales ante la resistencia de diversos sectores sociales.
“Dos decretos que Donald Trump ha lanzado para evitar el ingreso en Estados Unidos de personas que provengan de países del medio oriente: Siria, Libia, Somalia, Yemen, Sudán e Irán; sin embargo, se ha topado con su propio sistema judicial, pues los jueces en dos ocasiones han bloqueado dichas disposiciones arbitrarias, en tanto atentan en contra de los derechos humanos y en contra de la Constitución de los Estados Unidos de Norteamérica”.
Otro caso es el de la deportación de migrantes donde el también dirigente del Movimiento Antorchista en Texcoco refiere que el expresidente Barack Obama expulsó más migrantes que Trump en los primeros meses del año. “Datos del Instituto Nacional de Migración señalan que “del 1 de enero al 28 de febrero de 2017 fueron retornados 25 mil 785 mexicanos, un descenso del 13.5 por ciento, 4 mil 64 personas menos, en relación a los registrados en el mismo lapso de 2016: 29 mil 849”.
Otra de las políticas que no ha logrado consolidar Trump, desde el punto de vista del economista, es la de instrumentar aranceles a los productos mexicanos o chinos, la cual se ha visto frenada por la ley económica de la baratura y de la calidad de las mercancías que los propios Estados Unidos no pueden producir ni abastecer con algún otro socio comercial.
“En resumen, el muro de la realidad es el que se está imponiendo y frenando las arbitrariedades ideológicas de un sistema que con ello muestra los signos de su decadencia. Efectivamente, el sistema capitalista no tiene remedio, sus contradicciones son la fuente de su destrucción final”, expuso.
Añadió que los signos de la decadencia del sistema económico podrían ser la oportunidad para el nacimiento de una nueva sociedad “la clase poderosa va creando a sus sepultureros y las condiciones para que los desposeídos se eduquen, se organicen y luchen en contra de sus opresores. Las primeras campanadas del deterioro de las condiciones del mundo y, por ende, las condiciones para que la clase proletaria haga valer su fuerza mayoritaria, tome en sus manos el proceso, alcance el poder político y consiga que las relaciones sociales de producción dejen de ser relaciones de explotación, para que se conviertan en relaciones de colaboración recíproca”, concluyó.