- La mayoría de las economías presenta balanza comercial deficitaria, algunas con pérdidas muy elevadas, como Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala.
Toluca, México.- A partir del año 2000, Brasil y México fueron los países que absorbieron los mayores flujos de Inversión Extranjera Directa (IED) hacia la región de América Latina, 38.7 y 22.6 por ciento, respectivamente, señalaron los académicos de la Facultad de Economía, María Esther Morales Fajardo, Leobardo de Jesús Almonte y María Elena Ávila Morales.
Durante su participación en el Seminario «Inversión Extranjera Directa en América Latina. Una revisión de las economías latinoamericanas en los albores del siglo XXI», manifestaron que entre los argumentos que favorecen a la IED destacan los que le atribuyen efectos favorables en el crecimiento de la actividad económica y, en consecuencia, en el empleo.
México, puntualizaron, es una de las economías más grandes de la región y capta los mayores niveles de inversión, aunque en años recientes los flujos disminuyeron.
Los autores de la ponencia “Inversión Extranjera Directa en América Latina en los albores del siglo XXI” destacaron que los indicadores macroeconómicos refieren que existe un escaso crecimiento de América Latina en los recientes años.
Con relación al sector externo, la mayoría de las economías presenta balanza comercial deficitaria, algunas con pérdidas muy elevadas, como Nicaragua, Honduras, El Salvador y Guatemala, apuntaron.
María Esther Morales Fajardo, Leobardo de Jesús Almonte y María Elena Ávila Morales explicaron que los determinantes macroeconómicos de la Inversión Extranjera Directa en América Latina se basan en los flujos de inversión nueva, que favorecen el desarrollo industrial, el crecimiento de la actividad económica y, en consecuencia, las posibilidades de nuevos empleos formales.
Enfatizaron que durante la década de los noventa, la región recibió más de 404 mil millones de dólares por vía de la IED, 77 por ciento de estos ingresos fueron captados en la segunda mitad de la década, en tanto que los sectores beneficiados fueron: servicios (financiero), manufacturas y recursos naturales; y las economías mayormente beneficiadas fueron: Brasil, Argentina, México, Colombia, Venezuela y Chile. (Fotos de Internet).