- Hay dos mujeres por cada hombre afectado, entre los 20 y los 40 años de edad
- Es la segunda causa de discapacidad entre los jóvenes, tras los accidentes de tránsito
- Se desconoce el origen pero estudios indican una componente genética asociada a factores ambientales
Naucalpan de Juárez, México.- La esclerosis múltiple es una enfermedad degenerativa y crónica del sistema nervioso, de origen autoinmune, que afecta al cerebro y la médula espinal, y es más frecuente en mujeres que en hombres; habitualmente hay dos mujeres por cada hombre afectado, entre los 20 y los 40 años de edad.
En el marco del Día Mundial de la Esclerosis Múltiple, a celebrarse el próximo jueves 30, “es importante recordar a la población en general que algunas manifestaciones de esta enfermedad neurológica se presentan como deterioro cognitivo, los trastornos psiquiátricos, el dolor y la fatiga, son frecuentemente subestimadas, sin embargo, son a menudo los principales factores de la discapacidad, en las personas que se ven dañados por este mal.
El doctor Leopoldo Santillan Arreygue, titular de la Jefatura de Servicios de Prestaciones Médicas del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) de la Delegación Regional Estado de México Oriente, al informar lo anterior dijo que “los síntomas de la Esclerosis Múltiple son variables dependiendo de la localización, la extensión, la gravedad y el número de las lesiones. Son diferentes para cada persona, por ello se la suele conocer como la enfermedad de las mil caras. Los síntomas más habituales son de tipo motor, sensorial y fatiga”.
“El sistema inmune ataca a la mielina, que es la sustancia que envuelve las fibras nerviosas o neuronas. La mielina se deteriora y presenta cicatrices, conocidas como esclerosis, entonces aparece la inflamación. Los impulsos nerviosos que circulan por las neuronas se ven entonces entorpecidos o directamente interrumpidos, con los consiguientes efectos en el organismo”.
“Se desconoce, continuó el especialista del Seguro Social, el origen de la Esclerosis Múltiple, pero los estudios actuales indican que puede tener un doble origen, una componente genética asociada a factores ambientales. Estas últimas incluyen los niveles de vitamina D, la exposición solar, el tabaquismo y algunas infecciones virales.
“Además, esta enfermedad neurológica es la segunda causa de discapacidad entre los jóvenes, tras los accidentes de tránsito y vehiculares, y no tiene cura.
“Los tratamientos actuales mejoran el curso clínico, pero no son efectivos en todas las personas, y en algunos casos tienen efectos secundarios importantes que hay que valorar conjuntamente con el médico especialista”.
Santillan Arreygue concluyó señalando que “los aspectos sociales y laborales, las repercusiones personales y familiares, pueden producir un descenso notable en la calidad de vida de los pacientes, por lo que es importante abordar la enfermedad no solamente desde el punto de vista médico, se deben tratar también la afectación social, familiar y psicológica”.