Por: Javier Palafox Padilla
Desde el pasado mes de octubre, los campesinos organizados en el Movimiento Antorchista enarbolamos ante el Gobierno del Estado de México la demanda de fertilizante químico, el cual es muy necesario para fertilizar las tierras a fin de tener una buena cosecha. Al campesinado se le dificulta adquirir ese insumo porque cada vez es más caro.
Actualmente un bulto de fertilizante cuesta desde $219 pesos (sulfato de amonio estándar) hasta $460 pesos (dap 18-46-00) -precios de PRONAMEX-, y para una hectárea se ocupan 8 bultos independientemente de la mezcla que se aplique. En promedio el campesino tiene que desembolsar cerca de 3 mil pesos para adquirir fertilizante para sólo una hectárea.
Por eso es que la lucha para obtener este apoyo ha sido prioritaria para el antorchismo mexiquense. Pero, a pesar de manifestarnos con diversas acciones hasta llegar a una marcha de 25 mil antorchistas en fecha 11 de marzo, no encontramos solución por parte del gobierno estatal. En consecuencia, anunciamos otra marcha multitudinaria de 50 mil personas, pero, como llegó la pandemia a México, vino el confinamiento así vimos frustrada nuestra movilización, con lo que el Gobernador se libró de las consecuencias de dicho acto de protesta. Tal parece que, como lo dijo el Presidente de la República, también a Alfredo Del Mazo la pandemia le vino “como anillo al dedo”, pues al día de hoy prevalece su cerrazón de resolver a los 50 mil campesinos organizados en Antorcha.
Ante las gestiones que hicimos a la SEDAGRO, en su matriz en Metepec y en sus delegaciones en las diversas regiones del Estado, la respuesta fue que no contaban con recursos para resolver nuestra demanda. Pero, a través de gente cercana a la institución, nos enteramos que este apoyo sí se entregaría y sería bajado a los campesinos a través de la estructura del Programa Procura, estructura creada por el GEM para poder capitalizar los apoyos hacia las futuras campañas electorales.
Dicha información fue corroborada por nosotros en tres momentos. PRIMERO: En el mes de abril hicieron el empadronamiento las estructuras del PRI y solo aceptaron documentación de “auténticos priistas”, no aceptaron a gente identificada como simpatizante de otro partido y mucho menos a los reconocidos como antorchistas; como se dice, nos dejaron fuera. SEGUNDO: En el mes de mayo en entrevistas que tuvimos con los alcaldes de Jiquipilco y Jocotitlán, ambos de extracción priista, se declararon incompetentes e incluso dijeron que no fueron tomados en cuenta por el GEM para atender las necesidades de los campesinos de sus municipios y que el fertilizante bajaría por la estructura de Procura. Recalcó, a pesar de pertenecer al mismo instituto político. TERCERO. Ya para mediados del mes de junio la promesa se cristalizó para los priistas de hueso colorado, se entregó el fertilizante en todos los municipios de las zonas campesinas, cinco bultos por productor, en su mayoría Urea y Mezcla Maicera, fertilizantes que no rebasan los $400 pesos el bulto. Cabe destacar que las entregas fueron hechas con mucha reserva, para que no se enteraran los campesinos que no fueron tomados en cuenta y que son la gran mayoría en las comunidades.
Este último punto lo vino a confirmar el Gobernador el día 9 de julio en su visita al municipio de Morelos con estas palabras: “Conscientes de ese gran esfuerzo que han seguido haciendo a lo largo de estos días y semanas y meses difíciles, también impulsamos la economía familiar con la entrega de fertilizantes para que más de 40 mil productores del campo en todo el Estado de México, pudieran recibir sus fertilizantes para poder tener una mejor oportunidad de cosechar, de sembrar y de producir en sus tierras”.
¡Bravo señor Gobernador! Muy bien por esa acción “tan oportuna de su Gobierno” después de más de cien días de confinamiento. Pero, teniendo en cuenta que en 2019 entregaron más de 18,526 toneladas de fertilizante (equivalentes a 370,520 bultos) a 46,300 productores (8 bultos por productor) con una inversión de 172 millones 799 mil pesos, y que este año entregaron sólo 5 bultos a 40 mil productores, tenemos un producto de 200 mil bultos (equivalente a 10,000 toneladas) y considerando el precio de la materia entregada ($400 pesos), arroja una inversión de 80 millones de pesos. Esto quiere decir que la entrega de fertilizante 2020 es muy ínfima en relación a la de 2019, lo cual es reprobable.
Además de que el apoyo de fertilizante de este año no se compara con los anteriores, este fue dirigido exclusivamente a su clientela electoral, demostrando con ello que Del Mazo Maza aplica la misma táctica que López Obrador: usar los programas del gobierno para la compra de conciencias y asegurar votos para las próximas elecciones; con razón se entienden tan bien. Pues bien, señor Gobernador, si para usted ya quedó cubierta la demanda de fertilizante del campesinado mexiquense, lo único que nos resta decirle es que nos veremos las caras en el 2021.