Nicolás Romero, México.- Tras aprobarse la liberación de recursos federales, gestionados por diputados antorchistas, para la construcción de un centro de salud en la comunidad de San Isidro, el cual beneficiaría a más de dos mil habitantes de la zona, miembros del Consejo de Participación Ciudadana (Copaci), identificados con el gobierno local, boicotearon el arranque de las obra.
Con una inversión estimada de seis millones de pesos, esta obra pretende ofrecer servicios médicos de calidad para que los habitantes de San Isidro, así como de otras comunidades como Barrón, San Ildefonso, Fraccionamiento Mirador del Conde, entre otras, tengan acceso a una mejor salud.
Héctor Javier Álvarez Ortiz, diputado federal y dirigente de Antorcha en la zona noroeste del Estado de México, aseguró que no es extraño para la organización enfrentarse a ciudadanos o grupos políticos que buscan frenar proyectos encabezados por la organización social por miedo a perder sus cotos de poder.
“No dejaremos de luchar por el bienestar de la gente aunque intenten ponernos trabas. Somos conscientes de que la ciudadanía es presa fácil de la desinformación y que incluso, aunque nosotros propongamos mejoras, nos pueden rechazar, pero a eso y a más retos nos hemos enfrentado a nivel nacional y siempre hemos salidos abantes”.
Cabe señalar que de acuerdo con datos del propio ayuntamiento de Nicolás Romero, poco más del 50 por ciento de la población; es decir, más de 230 mil habitantes, no están afiliados a ningún servicio de salud, situación a la que se suma la falta de unidades de atención médica, pues actualmente el municipio cuenta apenas con un hospital y 26 hospitales, es decir, una clínica para más de mil 800 personas.
