- Durante la Sesión Ordinaria de la Comisión de Cambio Climático, presidida por el gobernador Eruviel Ávila Villegas, el rector de la UAEM consideró que el jefe del ejecutivo mexiquense da su justa dimensión a la protección de los recursos naturales.
- En este marco, el rector presentó el “Atlas de Riesgo ante el Cambio Climático del Estado de México”, documento de consulta que permitirá prevenir, anticipar y tomar acciones estratégicas.
- Eruviel Ávila Villegas, presidente de la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático, enfatizó el apoyo decidido de la Autónoma mexiquense a los proyectos que el gobierno le confía.
Metepec, México.- La Universidad Autónoma del Estado de México elaboró el “Atlas de Riesgo ante el Cambio Climático del Estado de México”, documento de consulta que permitirá prevenir, anticipar y tomar acciones estratégicas, puntualizó el rector Jorge Olvera García, durante la Sesión Ordinaria de la Comisión de Cambio Climático, presidida por el gobernador Eruviel Ávila Villegas, a quien reconoció por su visión ambientalista, pues da su justa dimensión a la protección de los recursos naturales.
En el marco del Día Mundial del Medio Ambiente, en Casa de Gobierno Metepec, donde se dieron cita las senadoras de la República, María Elena Barrera Tapia y Ana Lilia Herrera Anzaldo, así como el secretario del Medio Ambiente de la entidad, Miguel Ángel Contreras Nieto, Eruviel Ávila Villegas, presidente de la Comisión Intersecretarial de Cambio Climático, enfatizó el apoyo decidido de la Autónoma mexiquense a los proyectos que el gobierno le confía.
En esta reunión, donde también se dio cita el coordinador de Estudios y Proyectos Especiales de la Secretaría del Medio Ambiente, Omar Olvera Herreros, el gobernador dijo que el atlas es el primero a nivel nacional en formato digital y virtual, sobre riesgos hidrometeorológicos, quimicotecnológicos y sanitarioecológicos que permite medir los peligros potenciales y tener planes de contingencia.
Luego de inaugurar la segunda etapa del sistema fotovoltaico, en el conjunto SEDAGRO, que tiene como finalidad lograr mayor eficiencia en el consumo energético y fomentar el uso de energías renovables, cuya inversión fue de 30 millones de pesos, el jefe del ejecutivo mexiquense resaltó que el documento permite detectar y alertar de riesgos climatológicos en las zonas de mayor vulnerabilidad a fenómenos derivados del cambio climático.
Jorge Olvera García, presidente del Consejo Consultivo de Cambio Climático, refirió que este documento estará a disposición del público en general, a través de un visualizador en línea administrado por la Secretaria del Medio Ambiente.
Explicó que el atlas es una herramienta diseñada y elaborada por profesores, investigadores y alumnos de las facultades de Planeación Urbana y Regional, Geografía y Química; su importancia radica en identificar de manera puntual y precisa aquellas zonas o territorios más susceptibles de riesgos en toda la geografía estatal, donde mayormente la población es vulnerable.
Para la creación de este instrumento, detalló, se construyeron alrededor de 44 mapas, cada uno con una ficha y un texto interpretativo que incluye el objetivo, la metodología, la interpretación y la relación que tiene con el cambio climático, consiguiendo con ello mostrar áreas de oportunidad para mitigar los gases de efecto invernadero y aplicar sistemas de gestión de riesgos.
Por su parte, Miguel Ángel Contreras Nieto destacó que con el impulso, hace dos años, de la creación de la Ley de Cambio Climático en la entidad se establece la meta de producir en 2050 alrededor de 30 por ciento menos de gases de efecto invernadero que los que se emitieron en 2010.
Consideró que esta legislación de avanzada determinó la creación del Instituto Estatal de Energía y Cambio Climático, único en su tipo en el país, cuya labor se encamina a la mitigación del incremento de la temperatura.
Finalmente, Jorge Olvera García exaltó que la Universidad Autónoma del Estado de México participa en la formulación de estrategias y acciones que culminen en trabajos viables, posibles y contundentes ante el cambio climático; el trabajo, indicó, se elaboró bajo parámetros científicos y académicos que reducen probabilidades de error y permiten un ordenamiento territorial de los asentamientos humanos.
