- Con una inflación que no se había visto en más de 20 años, el manejo financiero es clave para toda compañía; sin embargo para las empresas familiares puede ser aún más complejo cuando tienen malos manejos y se enfrentan a una transición de liderazgo.
- En México, el 35% de las empresas fracasan por falta de liquidez y 29% debido a una mala administración.
El manejo de las finanzas es un tema complejo para cualquier empresa y ante un contexto como el actual, el reto puede ser mayor. Las compañías no pueden darse el lujo de tomar decisiones improvisadas cuando se trata de finanzas, ya que son un reflejo del estado y proyección de la compañía.
- “Esto se complica todavía más cuando se trata de un negocio familiar. Con frecuencia, el encargado de llevarlo por décadas concentra todo el poder de gestión y decisión y, por lo mismo, rara vez existe una transición paulatina y escalonada. Además, esto conlleva problemáticas que terminan por explotar aún más cuando se concreta el pase de estafeta. La falta de transparencia y rendición de cuentas de la administración previa puede ocasionar fricciones familiares que hagan aún más complejo el manejo de la compañía”, explica Guillermo Cruz, actual Presidente de ACAD y Socio de RSM México.
De hecho, según registros del estudio de la ASEM, entre los principales motivos de fracaso de una empresa se encuentran una falta de liquidez con 35% y una mala administración del negocio con 29%, a lo que se suman problemas con los socios con 28%.
¿Pero qué sucede cuando se hereda un negocio con finanzas endebles y sin un proceso de cambio generacional escalonado y paulatino? ¿Cómo puede una persona levantar esa empresa y revertir años de malos manejos o negligencias? Peor todavía, cuando esto sucede en medio de un escenario económicamente complejo.
“Sólo tres de cada diez empresas familiares sobreviven el recambio generacional. Y sólo una sobrevive al tercer pase de estafeta. Detrás de estas cifras hay una realidad muy dolorosa, una en la que las empresas familiares no saben cómo transicionar hacía un nuevo rumbo y en la que tampoco hay una buena gestión financiera, entonces cuando llega un nuevo liderazgo es complejo revertir un mal manejo financiero que lleva años de esta forma”, comenta el Dr. Cruz de ACAD y de RSM México.
Sin basamentos, no hay construcción
En julio de 2022, la inflación en México alcanzó niveles que no se habían observado en más de veinte años, con un 8.1% de tasa anual. El alza de precios generalizado actualmente presenta un contexto difícil para las pequeñas y medianas empresas mexicanas, en la medida que hay una posible recesión en el horizonte que implica bajas de ingresos para los negocios.
“En esa coyuntura una empresa debe robustecer su operación. Hacer a un lado la intuición y la tradición para hacer caso a decisiones colegiadas, bien pensadas y estructuradas: elementos básicos de lo que se conoce como gobierno corporativo. Sin embargo, el primer paso hacia ese tipo de consolidación pasa necesariamente por sanear las finanzas de una empresa mal administrada por muchos años”, concluye el actual Presidente de ACAD y Socio de RSM México.
Algunas recomendaciones para llevar una mejor gestión financiera son:
- Evaluar ingresos y egresos
- Reducir gastos poco prioritarios
- Definir metas financieras a corto y mediano plazo
- Revisar que el flujo de efectivo esté en niveles óptimos
- Revisar a detalles los estados financieros de los últimos 6 meses
- Implementar un plan de finanzas sanas para los próximos meses
La comunicación es otro de los elementos clave para tener finanzas saludables, ya que al interior de las organizaciones las diferentes opiniones respecto a este tema puede generar fricciones o desacuerdos. Para evitar esta situación, las compañías pueden recurrir a un consultor o asesor externo, quien debe ser imparcial y no tener nexos o relación con la familia para una mejor gestión.