- Estuvo dirigido a hijos de servidores públicos administrativos del Poder Judicial.
- Los niños tienen derecho, principalmente a ser amados, señaló Héctor Pichardo Aranza, integrante del Comité de “Yo por la Justicia”.
Toluca, México.- Con ritmo de música pop en cuya coreografía participaron 24 menores de 5 a 13 años de edad y la poesía coral “Queremos Justicia”, de Miguel Ángel Ortigoza García, concluyó el Curso de Verano de Inglés y Cultura de Legalidad “Yo por la Justicia” que estuvo dirigido a hijos de servidores públicos administrativos del Poder Judicial del Estado de México.
En la clausura del evento organizado por la Dirección de Educación Profesional de la Escuela Judicial del Estado de México, el magistrado Héctor Pichardo Aranza, integrante del Comité del Programa “Yo por la Justicia”, señaló que los niños tienen derecho a la educación y a la salud, pero principalmente a ser amados; además a expresar libremente su sentir y pensar.
En el Aula Magna, donde se entregaron las constancias a los pequeños, el director de la Escuela Judicial, Joaquín Mendoza Esquivel agradeció la participación de los menores que dijo, engrandece al Poder Judicial; añadió que la alegría, confianza y el gusto por el estudio de los niños y jóvenes alientan a los mayores a realizar un mayor esfuerzo en la sociedad.
Con la conducción de Guadalupe Garduño Guadarrama, coordinadora del Programa “Yo por la Justicia”, y durante dos semanas -del 1 al 12 de agosto-, los pequeños conocieron de temas como justicia restaurativa, Justicia el valor que ando buscando y el bullying, así como respeto de la norma.
El curso es un programa piloto que inicialmente tenía como finalidad solo la enseñanza del idioma inglés; sin embargo, se incorporó la cultura de la legalidad, a efecto de que todo el inglés fuera entorno a cuestiones de legalidad, sobre todo los principios éticos: lo correcto y lo incorrecto, lo que está bien y lo que está mal, para que desde los niños se transmitan estos conceptos hacia los padres.
A la clausura asistieron además las magistradas Patricia Martínez Esparza y Perla Palacios; padres de familia y autoridades de la Escuela Judicial. Posterior al evento, se llevó a cabo una convivencia.
