Tenancingo, México.- Desde temprana hora se escucha el paso y alboroto de los jóvenes que transitan por las pequeñas calles de la comunidad de Tepoxtepec, van a tomar clases en la recién inaugurada Escuela Preparatoria “José Martí”; a muchos pobladores del lugar, aún les cuesta creer que ya existe una institución educativa que imparte clases de nivel medio superior en la comunidad.
Aunque los pobladores ya llevaban mucho tiempo fantaseando con la idea de tener un espacio educativo para sus hijos, el deseo se disipaba cuando se topaban con los obstáculos montados por las autoridades con el fin de no otorgar apoyos a la educación, haciendo oídos sordos para no cumplir con la promesa de llevar educación a los poblados apartados.
“Nosotros necesitamos que nuestros jóvenes se eduquen, el maíz ya no es dinero, lo sembramos por costumbre y para que no falte la “papa”, pero para los gastos ya no sale, ya no se puede vivir de las cosechas, es por eso que nuestros muchachos deben educarse, no se vale ser “agachados” y morir “agachados”, por eso necesitábamos esta escuela, para que a las nuevas generaciones no les toque vivir como a uno”, platica lleno de confianza en la nueva institución, Mardonio Calvo Aguilar, campesino de Tepoxtepec.
La última prioridad de los gobiernos: La educación
En el pueblo, algunos vecinos como Don Mardonio, ya se habían organizado para pedirle a las diferentes administraciones municipales, la construcción de la preparatoria para que los jóvenes pudieran continuar con sus estudios cerca de sus casas, y así, poder evitar los cuarenta minutos y los treinta pesos diarios de traslado que implicaba asistir a las escuelas de las periferias, pero los demandantes siempre se encontraban con falsas promesas y “largas” por parte de las autoridades que desfilaban una tras otra sin cumplir la solicitud de los peticionarios.
Pese a que según, las últimas estimaciones del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), el municipio cuenta con una población total de 90 mil 946 habitantes, conformados por menores de 14 años y jóvenes que tienen de 15 a 29 años, que sumandos conforman un total del 60.43% de los habitantes; mientras que la población en el rango de 30 a 59 años y los mayores de 60, sólo suman el 39.56 %, por lo que se entiende que es municipio mayormente habitado por jóvenes.
Sin embargo, el municipio solo cuenta con 14 preparatorias que no alcanzan a satisfacer la demanda de educación requerida y aunque las cifras se incrementan año con año, los gobiernos no brindan apoyos encaminados a solventar la carencia de instituciones educativas en la entidad y se niegan a escuchar a quienes las demandan.
El pueblo organizado: Lucha y gana
Saúl Alva Sánchez, presidente del Comité de Agua Potable de Tepoxtepec, se había sumado a la lucha, evitando que los pobladores abandonaran el ideal de contar con la preparatoria en la comunidad, pero al ver que las autoridades no resolvían el problema decidió solicitar el apoyo del Movimiento Antorchista, una organización social que realiza gestiones ante los diferentes órdenes de gobierno en favor de los sectores más necesitados de la población, y del que también forma parte.
Y fue así que el sueño guajiro de la comunidad, comenzó a materializarse, aunque las autoridades municipales en un principio dijeron que era imposible construir una preparatoria, los pobladores y antorchistas le demostraron a los mandos que estaban equivocados y establecieron la institución educativa; sin embargo, no contaban con las instalaciones adecuadas para albergar a los estudiantes.
“Aquí urgía mucho una preparatoria, pues los jóvenes solo cursaban la secundaria y dejaban suspendida su preparación académica, ahora que ya la tenemos debemos de luchar por mejores condiciones para los alumnos”, decía Alva Sánchez, a la comunidad.
Así pues, los dirigentes de Antorcha realizaron distintas gestiones y la delegación del municipio prestó sus oficinas para que se convirtieran en los salones de clases de los más de noventa alumnos que hoy integran la matrícula de la preparatoria; para acondicionar el lugar, el Comité de Agua Potable, entregó algunos recursos para adecuar las instalaciones, mientras que el Movimiento Antorchista donó las butacas y pizarrones para que los jóvenes tuvieran las condiciones adecuadas para tomar sus clases y al ver esta situación, los ejidatarios como muestra de que la lucha era de todo el pueblo, decidieron donar un terreno para que albergara la escuela.
Inicia la lucha: la construcción de instalaciones dignas para los alumnos
La comunidad aliada al antorchismo inicio la lucha encabezada por el líder social Rafael Avendaño Hernández, para que las autoridades municipales designaran presupuesto para la construcción de las instalaciones de la preparatoria “José Martí”, el trabajo más difícil ya estaba hecho, pero nuevamente se encontraron con la negativa del representante de la actual administración, el edil priista Roberto Espiridión Sánchez Pompa.
“La presidencia municipal ha intentado reaccionar, pero como tal no nos ha dado un apoyo concreto, lo único que hemos logrado es que se comprometan a darnos material para iniciar la construcción de unas aulas provisionales, ellos se resisten a invertir y apostarle a este proyecto”, refería el dirigente principal del antorchismo en el municipio.
A pesar de ello, la desaprobación del presidente estaba muy lejos de frustrar la lucha, pues contrario a otras administraciones esto no detuvo a los campesinos, floricultores, ganaderos y comerciantes del poblado, como había pasado tantas veces antes, sino que los alentó a presentarse varias veces al Ayuntamiento para gestionar el proyecto y aunque se encontraron con un sinfín de dificultades, supieron persistir, tal y como está pasando con las nuevas sociedades que ya están cansadas de la demagogia que ofrecen los gobiernos.
Resultados de las gestiones
Los pobladores lograron que el gobierno municipal les entregara vales de materiales para la construcción de dos aulas provisionales, por lo que muy pronto comenzaran a erigir los primeros cimientos de la Escuela Preparatoria de Tepoxtepec, y sí bien el sueño se ha ido materializando poco a poco, los habitantes y estudiantes aseguran que seguirán luchando por que el proyecto avance y así las nuevas generaciones puedan tener mejores condiciones para estudiar.
La directora del plantel Marcela López López, ha dicho, “el gobierno siempre deja de lado la educación de los pueblos, pero luego de ver lo interesados que están en esta comunidad porque sus hijos se eduquen, vale la pena luchar por ello, este es nuestro primer ciclo y ya contamos con una matrícula de 92 alumnos, como institución estamos dispuestos a brindarle educación de calidad a los jóvenes y con ello resarcir un poco el rezago educativo que existe en Tepoxtepec”.
Nuevas metas
Los habitantes de Tepoxtepec, dicen que además de continuar luchando por mejores condiciones para la escuela “José Martí”, ahora tienen una nueva meta y es la de tener una casa de estudiantes para brindarles morada a los alumnos que carecen de los recursos para que ese no sea un motivo por el cual trunquen sus estudios; y aseguran que continuaran trabajando organizados con la ayuda del Movimiento Antorchista para que el progreso llegue a su comunidad.
