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“Tengo la ley, y si no sirve, también tengo la fuerza pública”: Barbosa

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Por: Lirio Denní García Córdova

En las últimas semanas, el Movimiento Antorchista Nacional ha hecho del conocimiento público la lista de atropellos y agresiones cometidos en su contra por el actual gobernador del estado de Puebla, Miguel Barbosa Huerta.

A falta de acceso a grandes medios de comunicación, las denuncias se han expuesto fundamentalmente en las redes sociales, en las calles con cadenas humanas y en todos los foros que han tenido a bien hacer eco de la infamia de que somos víctimas.

Los hechos se han presentado escalonadamente desde hace más de un año, sin embargo, en días recientes han tomado un preocupante cariz, pues atentan contra la vida y seguridad de cientos de miles de antorchistas poblanos y ciudadanos en general. Enumero los hechos rápidamente:

  • En 2019, con argucias legaloides, Miguel Ángel García Onofre declaró improcedente la petición del Movimiento Antorchista Poblano para convertirse en Partido Político, a pesar de que el Instituto Electoral del Estado de Puebla había avalado sus asambleas y el cumplimiento de todos los requisitos.
  • Poco después, en una reunión de presidentes municipales y ante los evidentes recortes por el gobierno federal, Miguel Barbosa declaró ante los presentes que habría apoyos para todos, menos para los de Antorcha.
  • En julio de este año, se giraron órdenes de aprehensión en contra del Ing. Juan Manuel Celis Aguirre, la doctora Soraya Córdova y Rosario Hernández, ésta última recibió la primera notificación; esto sin ningún delito cometido ni comprobado.
  • En días pasados, Santiago Nieto, titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), declaró que en coordinación con la fiscalía poblana (léase, por órdenes del gobernador) se habían congelado varias cuentas de dirigentes antorchistas, haciendo uso faccioso de la ley, pues no había ningún proceso legal válido que sustentara dicha medida.

A estas acciones se sumaron las que siguen: el pasado miércoles 9 de septiembre, un destacamento de policías entró con lujo de violencia a la casa de Cultura Aquiles Córdova Morán, ubicada en la emblemática colonia Balcones del Sur, argumentando tener órdenes de montar un departamento de la Fiscalía de Puebla en ese recinto y violentando el ambiente de tranquilidad de los jóvenes artistas presentes. Al día siguiente, siete camionetas del ejército con 40 elementos a bordo, llegaron nuevamente a Balcones del Sur, dirigiéndose a la unidad deportiva e intimidando a los deportistas, con el argumento de la supuesta “búsqueda de un menor”.

Hago el recuento rápido para que el paciente lector identifique que las agresiones del gobernador han escalonado en dos sentidos: en el tiempo en que se han presentado, pues las últimas dos acciones se han realizado con sólo 24 horas de diferencia; y en la peligrosidad, pues primero quiso escudarse en el abuso de la ley -ninguna de las acusaciones ha sido probada- y ahora quiere hacer uso de la fuerza pública.

A sabiendas de que no hay ningún mecanismo legal con el que pueda proceder en contra de los dirigentes antorchistas, y evidentemente molesto porque a pesar de sus intentos, no ha conseguido amedrentar a los simpatizantes de esta gran organización popular, el peor gobernador del país (sabido por propios y extraños, pues todas las encuestas lo colocan en el deshonroso último lugar de evaluación), ha decidido emprender una campaña de terror utilizando a la fuerza pública para intimidar a la población, en una de las colonias emblema del antorchismo poblano. Este es un claro mensaje para los antorchistas: “tengo la ley, y si no sirve, también tengo la fuerza”.

Para Luis Miguel Barbosa, gobernar significa instrumentar una política de terror contra sus detractores y opositores porque no ha tenido, en todo lo que lleva de gobierno, una sola política pública o social que pueda presumir. Sin embargo, se equivoca si cree que los antorchistas se amedrentan ante cualquier aprendiz de tirano. 46 años de lucha han demostrado que las agresiones, los golpes y la política de terror sólo han logrado consolidar el espíritu aguerrido del pueblo organizado que un día descubrió la fuerza de su número y su determinación. De cada lucha, Antorcha ha salido más fuerte y esta no será la excepción. Sea.