Por Alfonso Hernández González
Zinacantepec, México.- Isidro Pastor Medrano, ex titular de la Secretaría de Movilidad (antes del transporte) del estado de México, a la que llegó como titular en junio de 2014, confió en que si logró el reordenamiento del transporte en la entidad, sin embargo consideró que toda la corrupción que impera aun en la dependencia no deja ver los resultados.
Considerado como un buen estratega, entregado a lo que hace y alguien extremadamente perseverante, el ahora aspirante a la gubernatura mexiquense a través de la Candidatura Independiente para el proceso electoral que tendrá su día “D” el próximo 4 de junio, señaló en entrevista para El Pulso del Estado de México que, desde que llegó al puesto pugno por hacer una limpia general de la dependencia, acción que, incluso, terminó con acciones legales en su contra por parte de 30 de los 100 servidores públicos que se despidieron por encontrarles responsabilidad en actos de corrupción.
“Estuve dos años y medio al frente de la secretaria, pero tan solo el primero fue dedicado a limpiar la institución de tanta corrupción”, señaló.
Detalló que, en ese tiempo de gestión, lamentablemente no logro “agarrar” a todos los corruptos, pero sí se sentaron las bases para poder comenzar con el ordenamiento, tanto en procesos internos como en expedición de documentos.
En términos generales, Pastor Medrano dijo que el ordenamiento se construyó pues a su salida se dejó listo el documento elaborado… “Deje el proyecto del Libro Séptimo, con el que se ordenaba de tajo el transporte, con una visión eminentemente empresarial”, sin embargo, acusó, dicho documento nunca se entregó a la Cámara de Diputados, “se quedó entre la Consejería Jurídica, la Secretaría General o bien en la oficina del Gobernador, el problema es que ellos no quisieron meterse en problemas con 300 o 400 transportistas, les dio miedo”, lamentó.
En este sentido, consciente de que le faltó tiempo, consideró que se iba caminando bien por lo que espera que, en la nueva administración se puedan llegar a corregir los errores y hacer las cosas como se deben.
Explicó que, en caso de ser aprobado como Candidato Independiente y luego como electo gobernador en la entidad, su modelo de gestión estará basado en un gobierno de integración, apostándole a la justicia y a la designación de los mejores elementos, agregando que se pugnará por resultados y no por el cumplimiento de horarios en una silla.
Y advirtió: “En este momento no hay resultados, las oficinas están llenas de burócratas, pero sales a la calle y hay inseguridad, desempleo, mal transporte y miles de problemas más… es ineficiente el gobierno y no hay voluntad de cambiar las cosas”.
Finalmente reiteró que la legislación para Candidaturas Independientes está hecha con saña por parte de los partidos políticos, pues pese a que pareciera que se abre una puerta para los ciudadanos, la realidad es que aún se tiene un acrílico impenetrable, pero no descartó la posibilidad de que gracias al hartazgo ciudadano se tenga como independiente esa comprensión e identidad, y juntos ciudadanía y gobierno de integración derriben esa clase de barreras.
Y para corroborar uno de los temas, El Pulso del Estado de México revisó la numeralia de las elecciones inmediatas anteriores, las del 2015 para elegir 125 ayuntamientos y 75 diputaciones (45 uninominales y 30 plurinominales). La cuestión es que partidos políticos que se supone deben tener estructura territorial suficiente y necesaria, tuvieron números muy por debajo de los 330 mil que se exigen a los que aspiran a una Candidatura Independiente.
Veamos: el PT tuvo 192, 491 votos; PVEM 121,206; Movimiento Ciudadano 258,667; Nueva Alianza 152,112; Partido Humanista 124,792; Partido Encuentro Social 227,149; y Partido Frente Democrático 34,271. Sin olvidar que el Partido Humanista y el Frente Democrático perdieron su registro. Así, el requisito de las 330 mil firmas resulta cuestionable para un ciudadano que aspira a ser Candidato Independiente.