- El Centro Estatal de Mediación impartirá taller a funcionarios, líderes y autoridades del norte mexiquense.
Atlacomulco, México.- Fortalecer e incrementar las habilidades de líderes y representantes de pueblos originarios de Atlacomulco, Acambay e Ixtlahuaca, para una mejor solución de los conflictos que se registren en sus comunidades, preservando su cultura e identidad, es el objetivo del taller que imparte el Centro Estatal de Mediación, Conciliación y Justicia Restaurativa en la zona norte de la entidad.
Al inaugurar el “Taller de herramientas, técnicas y estrategias para fortalecer la intervención en los procedimientos restaurativos de mediación, conciliación y justicia restaurativa”, el titular del centro dependiente del Poder Judicial del Estado de México, Víctor Navarrete Villarreal, enfatizó que esta capacitación es un ejercicio de entendimiento y sinergia que reúne a funcionarios, líderes y autoridades de esa región interesados en el fortalecimiento restaurativo de los pueblos originarios.
En el evento, al que asistieron representantes del Consejo Estatal para el Desarrollo Integral de los Pueblos Indígenas y de la Comisión Nacional de Desarrollo para los pueblos Indígenas, así como de organismos federales, se señaló que uno de los propósitos del taller es la estructuración e inicio de funciones del primer centro de justicia alternativa comunitario.
Se pretende que dicho centro se ubique en “Pueblo Nuevo”, municipio de Atlacomulco, mismo que será atendido y gestionado por habitantes de la propia comunidad, con el fin de que las personas se sientan en libertad de conjuntar las prácticas ancestrales que siempre han utilizado, con los nuevos conocimientos en la resolución pacífica de sus conflictos.
En este sentido, el mediador Mario Montaño explicó que personal del Poder Judicial mexiquense capacitará a los asistentes en metodología y diseño en prácticas de justicia restaurativa, con el fin de que pueden intervenir en conflictos comunitarios y generar acuerdos pacíficamente.
Dichas acciones se llevan a cabo en estos tres municipios con los que se trata de generar un modelo pedagógico para replicarlo en los demás pueblos originarios; y forman parte del Proyecto de Fortalecimiento de la Justicia Restaurativa en América Latina, auspiciado por la Unión Europea y entre México, Costa Rica y Colombia.
