Toluca, México.- La Casa del Estudiante Ignacio Manuel Altamirano (CEIMA) de Toluca abrió nuevamente sus puertas para que jóvenes de escasos recursos principalmente del Valle de Toluca, en este próximo ciclo escolar, tengan un espacio para vivir mientras continúan con su educación media superior y superior.
Abelina Diego Alaya, responsable estudiantil de la CEIMA, indicó que cuentan con dos casas; una para mujeres que se encuentra ubicada en Laguna de Coyutlán N° 306 y otra para hombres en Avenida Adolfo López Mateos N°1513, ambas en la colonia Nueva Oxtotitlán, en las que se brindan servicios de hospedaje y alimentación a bajo costo a los jóvenes de escasos recursos provenientes de comunidades y municipios alejados del Valle de Toluca, en su mayoría, hijos de campesinos que vienen a la capital mexiquense a realizar sus estudios.
“Además del cobijo, se les imparten talleres de danza, música, baile, declamación y ajedrez, y en el área deportiva, futbol, basquetbol y voleibol; actividades totalmente gratuitas que sirven para fomentar valores como la disciplina, constancia, trabajo en equipo, respeto y responsabilidad, que servirán para que en un futuro sean personas que ayuden al desarrollo del país”.
“Para cumplir este objetivo y para que los jóvenes gocen de condiciones óptimas, también encabezamos una lucha estudiantil con la cual pretendemos obtener recursos aplicables en infraestructura y mobiliario. Nos hace falta un subsidio alimenticio y mobiliario, pero vamos a esperar a que entre la nueva administración para darle a conocer nuestras necesidades y así, mejorar las condiciones de los habitantes de la casa del estudiante”, indicó Diego Alaya.
Durante la visita a la morada estudiantil, se encontraban instalando dos jovencitas que vivirán próximamente en la CEIMA. La señora Marisol Reyes Cadena, madre de una de ellas, expresó que gracias a las facilidades que brinda este recinto estudiantil, su hija quien logró ingresar a la Facultad de Psicología, ahora tendrá un lugar para quedarse, pues por el tiempo y costo que implica desplazarse desde Jilotepec, municipio de donde ellas provienen, sería imposible.
Fue por sus vecinos dijo, que se enteró de la existencia de este albergue en donde solamente tendrá que pagar cien pesos a la semana, con lo cual podrán tener un ahorro en su economía, además de aprender como parte complementaria a sus estudios, talleres culturales y deportivos sin ningún costo.