Villa del Carbón, México.- A pesar de que el Estado de México a nivel nacional obtiene los primeros lugares en producción en volumen de productos agrícolas, la falta de políticas gubernamentales que fortalezcan al pequeño campesino, han propiciado pobreza en el campo, señaló el dirigente campesino del Movimiento Antorchista en Villa del Carbón, Luis Ángel Patricio Rivera, al indicar que los pequeños productores al no contar principalmente con fertilizante subsidiado pierden sus cosechas.
Refirió que el estudio elaborado por la Subdirección de Información y Estadística de la Secretaría del Campo; con datos del Servicio de Información Agroalimentaria y Pesquera 2020, informó que el Estado de México ocupa el primer lugar en producción de haba verde, romeritos, rosa, rosa en planta, terciopelo, triticale, tuna y clavel; el segundo lugar en avena de grano y gladiola; el tercer lugar en aguacate, amaranto, caña de azúcar y nopalitos; el cuarto lugar en avena forrajera, maguey pulquero, guayaba, maíz de grano cebada de grano, durazno, papa y zanahoria; y quinto lugar en cebada de grano, durazno, elote y maíz forrajero.
En contraparte el 55.3 por ciento de la población rural es pobre, de acuerdo al Centro de Estudios para el Desarrollo Rural Sustentable y la Soberanía Alimentaria de la LXIV legislatura de la Cámara de Diputados, dato que afianza que en los dos últimos años se incrementó la pobreza en el Estado de México al pasar del 41.8 al 48.9 por ciento y la pobreza extrema se acrecentó en 3.5 puntos, según reveló el informe sobre Medición multidimensional de la pobreza en México del CONEVAL.
Que junto a la deforestación, erosión de suelos, cambio climático, pérdida de agrobiodiversidad, falta de mercados justos, migración de jóvenes y violencia, son los principales problemas que amenazan al campo mexicano, de acuerdo a Elena Lazos Chavero, del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM. A ello se suma la falta de integración de políticas agroalimentarias, además de las vulnerabilidades político-culturales y socioambientales, acumuladas por décadas; que en los últimos cuatro años se han agravado al priorizar los recursos a las obras emblemáticas de la administración federal y hacer de lado las necesidades del pueblo y los campesinos.
Por lo que los pequeños productores del campo, ante la falta de apoyos al campo y fertilizante subsidiado, están por perder sus cultivos; ante esta situación los pequeños parcelarios saben que de forma unida y organizada pueden levantar su voz para solicitar y gestionar que el gobierno de la entidad les brinde los apoyos para impulsar la producción en el campo; solo falta que el gobierno mexiquense volteé la mirada hacia el campesinado, reseñó. Sin embargo, concluyó, el problema se profundiza cada año y ante esto la solución definitiva es educarse políticamente y luchar por un cambio de sistema económico que distribuya la riqueza social que producen los trabajadores.
