Por: Alejandro Olivares
Valle de Bravo, México.- Concluida la veda electoral por las elecciones del 1 de julio, el gobernador del Estado de México, Alfredo del Mazo Maza, retomó las labores del programa “Salario Rosa” con la entrega de esta tarjeta en reconocimiento a la labor de amas de casa provenientes de 33 municipios del suroeste del estado.
“Este programa no se acaba. Este programa está empezando, primero que nada, para ayudar a las amas de casa, a las mujeres que más lo necesitan. Y por eso el día de hoy estamos cumpliendo, y lo hacemos una realidad para ustedes: para las amas de casa que todos los días se entregan para sacar adelante a su familia”; aclaró el candidato, y aseguró que este programa no finalizará hasta alcanzar a mujeres de los 125 municipios del estado.
Detalló que dicho apoyo se conforma de un pago bimestral de 2 mil 400 pesos, con el que podrán hacer mejoras a sus hogares, pagar la educación de sus hijos, utilizarlo para consultas médicas, o invertirlo en lo que ellas consideren más conveniente.
Asimismo, Alfredo del Mazo señaló que, junto con este apoyo económico, el programa también brindará a las mujeres beneficiadas capacitaciones laborales, accesos para una preparación académica, así como apoyos para impulsar proyectos productivos.
Por su parte, Eric Sevilla Montes de Oca, secretario de Desarrollo Social, aseguró que este programa es una política social de nueva generación, que busca ser inclusivo, integral y solidario con las amas de casa mexiquenses para estimular el desarrollo humano y así combatir la pobreza con un enfoque multidimensional.
“Las mujeres son las que mantienen a un hogar unido, son las que se encargan de la familia, son las que sacrifican su desarrollo personal por el desarrollo de sus hijos, de sus esposos, de sus padres incluso. Por eso el Salario Rosa es para ustedes”; aseveró Alfredo del Mazo.
Finalmente, el gobernador convocó a las mujeres beneficiadas a convertirse en voceras del Salario Rosa, para que todas las mujeres mexiquenses sepan que este programa es una realidad que las apoya a ellas y a sus familias.
