- Teoría y práctica aplicada al mundo real
Nicolás Romero, México.- Estudiantes de segundo grado de la Escuela Secundaria Técnica, Industrial y Comercial 112, General Felipe Ángeles, llevaron a cabo una práctica como parte del taller de gastronomía que se enseña en este plantel propuesto por el Movimiento Antorchista, y que es único en escuelas públicas de Nicolás Romero, la cual consistió en llevar a cabo una muestra gastronómica para simular la experiencia de una visita a un restaurante.
Javier Rodríguez González, director del plantel, explicó que uno de los principales objetivos de este tipo de proyectos es, por un lado, “que los padres de familia vean lo que sus hijos han aprendido y a su vez, los estudiantes se den cuenta del potencial que tienen para desarrollar este tipo de actividades, que sean autónomos, y que vean las capacidades que tienen para llevar a cabo cualquier cosa que se propongan”.
Por otra parte, dijo, “prácticas como ésta acercan a los chicos al mundo profesional, además de enseñarles algunos valores como el trabajo en equipo y la organización, se les inculca el valor de la responsabilidad, porque para hacer algún alimento o una bebida se requiere un manejo y control de varios insumos, además de que tienen que cumplir con diversas normas, principalmente aquellas que tienen que ver con los alimentos y en la manera en que se preparan”.
El concepto que los alumnos desarrollaron llevó por nombre El Diamante y se efectuó en el aula donde se imparte esta especialidad, la cual fue decorada para representar un restaurante bar. Contó con un espacio para recepción, mesas y sillas con mantelería y al fondo del salón, se dispuso la cocina y la barra en la cual se preparaban las bebidas.
El menú que los jóvenes ofrecieron consistió en una botana hecha con bollos, jamón y queso amarillo, así como una tabla de aperitivos, la cual era presentada con salchichas cóctel rellenas con queso, trozos de ate, y pedazos de queso manchego, panela, gouda y doble crema. En materia de bebidas se ofreció: naranjada, canica, (hecha con agua mineral, limón y jarabe de granadina), conga, piñada y smoothies de manzana, mango y frutos rojos.
A través de esta experiencia pedagógica, en la cual se combinó la teoría con la práctica, es como los alumnos pudieron conocer la forma de cómo se trabaja en el negocio de los alimentos y sobre la complejidad que ello implica, lo cual ha hecho de esta experiencia algo valioso tanto en su formación dentro del taller de gastronomía, como en su aprendizaje en el mundo de la vida.
